Me han hecho tanto daño
que pensé que eran dibujos animados,
me causaron tanto dolor
que creí que no podía ser real,
me hicieron sufrir tanto
que llegué a pensar que había sido sin querer.
No sé perdonar
ni creo que haya alguien que lo consiga.
Lo que puedo hacer es como que olvido,
convencerme a mí mismo
de que no me acuerdo de nada,
de que el pasado es una ficción del presente.
Y sonreír, sonreír, sonreír.
Como el puto Bugs Bunny.
egm.2013