Elegía al capitán Roald Amundsen que desapareció en el Polo Norte
Oh captain! My captain!
Walt Witman
[1]
Te reservaba un secreto,
aún,
el mar de nieve.
El descubrimiento de su reverso,
y tú, arropado en esa mortaja blanca,
—¡oh silencio helado!—
repitiendo a los oídos del mundo
la victoriosa voz:
¡Tierra!
.
[2]
Nadie pudo encontrar entre la nieve
esos labios helados
que se le perdieron al silencio.
Y las lejanías,
libres,
desciñeron la soledad.
En el remolino
de la última ráfaga de viento
se fue toda esperanza
y el Sol, apagado.
Ninguna voz podrá atreverse
sin caer muerta a los pies de la nieve
como un pájaro joven.
¡Oh Capitán! ¡Mi Capitán!
.
→Manuel Antonio. Elexía ao capitán Roald Amundsen que se perdeu no Polo Norte
Traducción de Enrique Gutiérrez Miranda
(Fusión de dos poemas aparentemente inconclusos de la obra de Manuel Antonio; el segundo es el titulado ‘Elexía…’)